En la actualidad tenemos una cantidad muy grande de información sobre dermatología a la mano, pero no siempre es la más certera y confiable, así que si buscas saber cómo cuidar la piel en verano te daremos unas pautas útiles, siempre recomendando que asistas a tu médico de cabecera para que te dé mayor asistencia.

En esta estación del año es cuando nuestro cuerpo más se expone al sol y a una cantidad infinita de agentes externos que lo único que hacen es dañarla, por lo que con los siguientes consejos tienes una importante base para mejorar su apariencia.

¿Qué debo hacer por mi piel?

  • Lo primero es conseguir productos de farmacia que sean exfoliantes, es primordial quitar toda la piel muerta para que se vea sano todo nuestro cuerpo. También hay formas de hacer exfoliantes caseros, así que tu creatividad la puedes poner al máximo.
  • Mejorar la limpieza es clave respecto a cómo cuidar la piel en verano, porque siempre se acumula en ella restos de nuestro ambiente y esto la hace lucir envejecida. Lavar y secar bien al menos 2 veces al día, quitar con cuidado el maquillaje usado en las noches, buscar productos que se amoldan a nuestro tipo de piel son las claves para mantenerla en el mejor estado posible durante todo el año.
  • También es muy importante la hidratación de nuestra piel, ya que sin ella se agrieta y deteriora con más rapidez de la que nos gustaría admitir. Hay emolientes muy buenos en cuanto a cosméticos, cremas para el rostro de día o de noche, simplemente es cuestión de que no se nos olvide ni un día, así veras como permanece suave y brillante, sumado a la hidratación (agua) que consumamos diariamente para nuestra propia salud y bienestar.
  • Con el estímulo del sol la piel obviamente se va a inflamar, obviamente el organismo tiene mecanismos para luchar con este proceso, pero hay que ayudarlo con cremas que tengan factor de protección o en su defecto, un buen protector solar para rostro y cuerpo.
  • También siguiendo el tema de cómo cuidar la piel en verano se debe mejorar la alimentación y eliminar las bebidas alcohólicas de la dieta. El alcohol va a disminuir la producción de colágeno, así como la comida rápida, que únicamente deteriora tu calidad de vida.