La piel es el órgano más grande del cuerpo y el más expuesto al medio externo. Entre la contaminación ambiental y la exposición de los rayos UV, la piel está propensa a cambiar su apariencia jovial y natural por verse envejecida y descuidada; también influye la alimentación, hidratación e higiene en el aspecto de la piel.

Si deseas lucir saludable deberás considerar cambiar ciertos hábitos o implementar una rutina para el cuidado de tu piel, especialmente en el caso de que quieras exhibir un cutis de porcelana.

El cuidado de nuestro rostro tiende a ser minucioso y delicado, ya que esta área es más sensible, las técnicas y productos en comparación al resto del cuerpo varían. Existen distintos tipos de limpieza del rostro que ayudan a mejorar nuestro semblante, como es el caso de la doble limpieza facial.

Limpieza facial doble

Las limpiezas en el cutis se realizan para eliminar las impurezas de nuestro rostro, agudizar las ojeras, eliminar puntos negros o espinillas, suavizar las líneas de expresión y arrugas.

Se pueden realizar en un centro estético, spa, dermatólogo o desde casa. Para que tú limpieza sea más eficaz tienes que considerar cómo es tú piel, si es grasa, seca o mixta, ya que los productos que uses (naturales o químicos) deben estar adecuados a tus características.

Para comprender primero qué es la doble limpieza facial hay que conocer de qué otras maneras se limpia el rostro y por qué esta rutina es más eficiente.

  • Limpieza facial semi profunda o básica: es una limpieza que se enfoca en remover las impurezas del cutis a través de una rutina. Se emplea el desmaquillante (en caso de haberte maquillado), luego el limpiador facial, se prosigue con la crema exfoliante, crema hidratante y tónico.
  •  Limpieza profunda: este tipo de limpieza tiene una práctica similar a la anterior, pero se añade la aplicación de vapor para poder hacer la extracción de puntos negros y espinillas, al final se masajea el rostro con el tónico o crema humectante.
  • Doble limpieza facial: es una técnica practicada principalmente por mujeres coreanas, pero en los últimos 3 años se ha popularizado esta rutina en el resto de los países, ya que garantiza una piel de porcelana, es por eso que se ha convertido en la más buscada.

Es una limpieza que se realiza en dos fases con solo aplicar 3 productos. Primeramente, deberás limpiar tu piel con un limpiador facial o lavar tú cutis con agua y jabón (debe ser especial para el rostro), progresivamente empleas un producto limpiador a base de aceite, sirve para quitar residuos.

Aplicar un limpiador acuoso, para ello deberás fijarte que sea para tu tipo de piel. A diferencia de las limpiezas anteriores, que son recomendadas realizarse 1 o 2 veces al mes, la doble limpieza facial se puede emplear continuamente por el día o por la noche, en caso de que hayas usado maquillaje o no lo utilices.