El kobido consiste en una serie de secuencias de movimiento rápidos y lentos que persiguen mejorar la circulación, sistema linfático, tanto de cara, cuello, escote y hombros.
Potencia la producción de colágeno, la piel se ve más elástica y disminuye las líneas de expresión y arrugas, también tiene un efecto drenante arrastrando toxina y evitando retención de líquidos, activa circulación de la sangre aportando luz.
Resulta muy beneficioso para personas que tiene bruxismo porque disminuye los efectos que tiene este trastorno en la zona maxilofacial.
También mejora problemas como manchas, psoriasis y piel seca.